Noticias del Proyecto Pintia

Fallece Lorenzo Duque, cantero de la naturaleza

X 1/03/2023

Fotografía de <i>El Norte de Castilla</i>

Malos tiempos para el arte en Valladolid. Y malos tiempos para la familia pintiana. Si la pasada semana despedíamos a Fernando Colomo, en esta ocasión tenemos que lamentar la pérdida de Lorenzo Duque, el pasado día 28, a los 70 años y tras sufrir una larga enfermedad.

Nacido en La Mudarra, se estableció en Laguna de Duero hace treinta y cinco años, lugar donde fundó su taller y ancló su nueva vida. Su obra pública se encuentra diseminada por toda la provincia (Villalar de los Comuneros, La Seca, Laguna de Duero, Villanubla, Valladolid, Serrada, Campaspero, San Miguel del Arroyo, Medina de Rioseco, La Santa Espina), así como en otros entornos rurales próximos como Páramo del Sil (León), la senda de Ursi (Villabellaco, en la montaña palentina) o Santiago de Aravalle (Ávila), Cisneros de Campos y Cervera de Pisuerga (Palencia), entre otras localidades.

Aunque trabajaba también el mármol, el hierro, la madera y piedras de distintos orígenes y con diversas técnicas, sus mejores obras fueron elaboradas en la caliza del Alcor, de color crema y textura de travertino, recuerdo permanente de sus orígenes en los Torozos. Sus obras personales emanan de la naturaleza, bien dotadas de rostros y rasgos animales o antropomórficos, bien como formas aleatorias orgánicas o inorgánicas.
Fue un miembro destacado del Grupo Muriel, colectivo de artistas fundado en la provincia de Palencia a finales de los años ochenta del pasado siglo, y desplegó una notable actividad cultural y social en su pueblo de acogida, Laguna de Duero, como resultado de su extraordinaria humanidad. Su taller, Canis Lupus, «más que una empresa, es un taller o estudio de Arte y/o Artesanía, en el que se realizan obras en tres dimensiones».

Buen amigo de Pintia, participó en todas las ediciones la muestra VacceArte. Arte Contemporáneo de Inspiración Vaccea (2008-2019) y siempre se encontrará entre nosotros, gracias a dos obras que campean sobre la necrópolis de Las Ruedas: El señor de la bellota, vigilante eterno del descanso vacceo; y el monolito erigido en 2009 para celebrar el cincuentenario de la publicación de La región vaccea, de Federico Wattenberg, en piedra blanca de Campaspero, que destaca como un faro sobre el océano de tumbas milenarias.

Te echaremos de menos, amigo. Juega con la piedra toda la eternidad.

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